Pastel de tres leches para Navidad

lunes, 8 de diciembre de 2025

La primera vez que probé este pastel me encantó, delicado, dulce, tierno y esponjoso, y con una cobertura que no podía estar más rica. Es verdad que no es de los más bonitos que he visto, pero su sabor hace que sea uno de los postres más ricos que hay.

Como la temática de mi cumpleaños va sobre México, su cultura y su gastronomía, no podía faltar este deliciosos dulce. El pastel de tres leches es un pastel de elaboración más larga que complicada, de consumo muy extendido, con raíces particularmente sólidas en el estado de Guerrero.

El pastel de tres leches tradicional se cubre con una capa de merengue. Nosotros lo vamos a servir con una capa de nata y, para darle un toque navideño, vamos a terminarlo con un poco de canela, que complementa los sabores del pastel.

¿Me acompañas? Pues nos ponemos el delantal y a cocinar. Los ingredientes que vamos a necesitar son:

Para el bizcocho:

5 huevos

150 g de azúcar

1 cucharadita de vainilla

125 g de harina

1 cucharadita de levadura

1/8 de cucharadita de sal

Para la mezcla de tres leches:

300 g de leche evaporada

300 g de lata de leche condensada

300 g de leche entera

Para la cobertura:

500 ml de nata para montar

4 cucharadas de azúcar glas

1 cucharadita de esencia de vainilla

Para la presentación:

canela en polvo

Podemos añadir a la mezcla de tres leches un poco de ron mexicano que se caracteriza por su sabor suave y equilibrado con notas a caramelo, vainilla y especias, que lo hace ideal para aportar sabor y aroma a nuestro pastel. Un poco de café para darle otro sabor y aroma. Pero si lo hacemos para que también lo puedan disfrutar los más pequeños de la casa, es mejor la mezcla de tres leches y espolvorear nuestra especia preferida, ya sea canela cardamomo... o lo que nos recuerde a la Navidad.

Preparación:

Elegimos un molde de 23x32 cm, untamos la mantequilla su interior y espolvoreamos un poco de harina. Precalentamos el horno a 175ºC con calor arriba y abajo.

En un bol batimos las yemas de huevo, la vainilla y el azúcar hasta que le mezcla esté suave y doble el volumen. Yo suelo utilizar un procesador de alimentos. Añadimos la harina tamizada junto con la levadura y la sal e integramos sin sobre mezclar.

Introducimos las claras de huevo en otro bol limpio del procesador de alimentos y batimos hasta que se formen picos y la mezcla esté brillante.

Ahora, agregamos las claras de huevo batidas en la mezcla de yemas de huevo y harina. Yo suelo añadir un poco de clara al primero, lo integro y luego añado el resto de las claras montadas.

Vertemos la mezcla en la bandeja de hornear y horneamos durante unos 15 minutos a una altura media baja, o hasta que, al insertar un palillo en el bizcocho, este salga limpio y la parte superior esté dorada. Sacamos del horno y lo dejamos enfriar completamente sobre una rejilla.

Mientras, preparamos la mezcla de tres leches, para ello, en un bol o jarra grande mezclamos la leche evaporada, la leche condensada y la leche entera y la llevamos a la nevera hasta que la vayamos a utilizar.

Una vez el bizcocho esté completamente frio, lo pinchamos con ayuda de un palillo, vertemos la mezcla de tres leches de manera uniforme sobre nuestro pastel, asegurándonos de verter cerca de los bordes y por todos lados.

Cubrimos con papel de aluminio, llevamos a la nevera y dejamos reposar durante al menos 2 horas. Yo lo suelo dejar toda la noche, para permitir que el bizcocho absorba la mezcla completamente.

Transcurrido este tiempo, preparamos la cobertura, para ello, vertemos la nata montada en un vaso de un procesador de alimentos junto con el azúcar glas y la esencia de vainilla y batimos hasta que se formen picos firmes.

Presentación:

Justo antes de servir, sacamos el pastel de la nevera y cubrimos con la nata montada. Para terminar, espolvoreamos un poco de canela, que es una de las especias que más nos gustan y asociamos a la Navidad. Llevamos a la mesa y a disfrutar de esta fiesta en compañía de la familia.