En casa siempre hay plátanos, de hecho, cuando nos dijeron que Ma Petite Chloé podía ser alérgica al plátano no lo podíamos creer, porque es una de las frutas que más consumimos y más nos gusta a Monsieur Accidents y a mí.
Hoy tengo unos plátanos que se han pasado un poco, así que he pensado que aprovecharlos haciendo un bizcocho. Para ello, nos vamos a basar en la receta "Banana bread" que viene en el libro "Cuisine Cocooning. 120 recettes. Pour hiberner sur le canapé" de Larousse. Este libro de recetas me lo traje de Francia en mi último viaje en el que visité a la familia.
Los ingredientes que vamos a necesitar son:
2 plátanos maduros
1/2 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
1 huevo
125 g de mantequilla blanda
180 g de azúcar moreno
1 yogur natural
180 g de harina
1/2 cucharadita de sal
1 cucharadita de levadura
1 cucharadita de bicarbonato de sodio
Nosotros vamos a elaborar la receta con panela en lugar de azúcar moreno, esto hará que el bizcocho tenga un color más oscuro.
Si no tenemos bicarbonato sódico utilizaremos el triple de cantidad de polvo de hornear, es decir, cuatro cucharaditas en total.
Preparación:
Preparamos tanto los ingredientes como los utensilios que vamos a necesitar. Tamizamos la harina junto con la levadura, el bicarbonato y la sal. Reservamos.
Quitamos la piel a los plátanos, los introducimos en un bol y los machacamos con ayuda de un tenedor, añadimos la vainilla y removemos. Reservamos también.
Engrasamos y enharinamos el molde que vamos a utilizar, yo he utilizado uno rectangular de 23,5x10,5 cm, pero si quieres que salga más alto, te recomiendo que utilices otro más pequeño. Precalentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.
Cascamos el huevo y lo introducimos en un vaso de un procesador de alimentos, añadimos la mantequilla, el azúcar moreno o panela, en nuestro caso, y el yogur y batimos. Agregamos la harina tamizada mezclada junto con la sal, la levadora y el bicarbonato de sodio mientras seguimos batiendo. Para terminar, agregamos el plátano y mezclamos con ayuda de una espátula.
Vertemos la masa en el molde engrasado y enharinado, llevamos al horno y horneamos durante 50 minutos a una altura media baja.
Transcurrido este tiempo, revisamos la cocción, si el bizcocho está hecho, sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla. Desmoldamos y lo dejamos que se enfríe por completo en la rejilla.
Presentación:
Cuando vayas a servirlo, te aseguro que no te vas a poder resistir a probarlo mientras lo partes. Servimos en una fuente de presentación y llevamos a la mesa, si ha sobrado algo, claro.
¿Has probado esta receta clásica? ¿Cómo la sueles hacer? Nosotros hemos preparado alguna otra receta de banana bread antes, pero esta versión es la primera vez que la hacemos y nos ha gustado mucho.
Buscando el origen de esta receta, he descubierto que surgió en América del Norte cuando el polvo de hornear o levadura comenzó a estar disponible en las tiendas, sobre la década de 1930. Se cree que el pan de plátano fue un subproducto de la Gran Depresión, ya que las amas de casa se las ingeniaron de esta forma para no tirar los plátanos demasiado maduros.
Bon appétit!