Bollos suizos (Reto #Asaltablog)
domingo, 30 de septiembre de 2018
Comenzamos la sexta temporada del Reto #Asaltablogs. Qué ganas tenía, ya lo echaba de menos y eso que sólo han sido una vacaciones de dos meses.
El primer asalto de esta temporada es al blog de Ana Melm. Os recomiendo que le echéis un vistazo a Migas en la mesa, os va a encantar todas sus recetas, de las que he elegido robar la de Bollos suizos.
El bollo suizo es un tipo de brioche que se servía como desayuno y merienda en los cafés de Madrid de finales del siglo XIX, destacando especialmente los que se ofrecían en el Café Suizo, de ahí su nombre.
El bollo suizo es un tipo de brioche que se servía como desayuno y merienda en los cafés de Madrid de finales del siglo XIX, destacando especialmente los que se ofrecían en el Café Suizo, de ahí su nombre.
Los ingredientes que vamos a necesitar para hacer mi versión de estos bollos son:
Para el prefermento:
100 g de harina
100 g de leche
3 g de levadura seca de panadero
Para el prefermento:
100 g de harina
100 g de leche
3 g de levadura seca de panadero
Para la masa:
450 g de harina de fuerza
150 g de leche
2 huevos
90 g de azúcar
5 g de sal
80 g de mantequilla
Para la cobertura:
1 yema de huevo
1 cucharada de leche
1 cucharada de leche
1 cucharada de anís
3 cucharadas de azúcar
Ana utiliza en su receta leche de avena para que los intolerantes a la lactosa la puedan comer. Y en cuanto a la mantequilla nos comenta que "Casi todos los intolerantes podemos tomar mantequilla normal, dado que la presencia de la lactosa es residual, pero si tú no puedes, existen mantequillas especiales en el mercado." La mantequilla tiene que estar a temperatura ambiente.
El azúcar que utiliza para preparar la masa es azúcar moreno, nosotros vamos a utilizar azúcar blanca tanto para la masa como para la cobertura.
El anís se puede sustituir por agua, pero el anís le aportará más sabor a los bollos.
El anís se puede sustituir por agua, pero el anís le aportará más sabor a los bollos.
Preparación:
Lo primero que vamos a hacer es un prefermento que hará que el resultado de nuestra masa sea mucho mejor. Para ello, en un bol ponemos 100 g de harina, 100 g de leche y la levadura, mezclamos bien, tapamos con un trapo y dejamos reposar hasta que la masa burbujee.
El tiempo que tarda depende de la temperatura ambiente, a más calor más rápido trabajará la levadura. El fermento estará listo cuando esté lleno de burbujas. En este caso hemos esperado 1 hora y media.
El tiempo que tarda depende de la temperatura ambiente, a más calor más rápido trabajará la levadura. El fermento estará listo cuando esté lleno de burbujas. En este caso hemos esperado 1 hora y media.
Cuando el fermento esté listo, agregamos el resto de los ingredientes menos la mantequilla. Mezclamos hasta obtener una masa homogénea.
Ahora tenemos que amasar, que puede ser a mano o con ayuda de un procesador de alimentos con el accesorio gancho. Si vamos a amasar a mano, antes de empezar a extraer la masa del bol, espolvoreamos un poco se harina sobre la superficie de trabajo. Amasamos un minuto, descansamos dos y repetimos la operación hasta que la masa esté tensa.
Cuando la masa esté lista, podemos pasarla a un bol enharinado, cubrimos con un paño y dejamos reposar la masa en un lugar libre de corrientes durante 1 hora o hasta que duplique su tamaño. En este caso hemos tardado 3 horas y media.
Una vez la masa haya doblado su tamaño, la colocamos en la encimera ligeramente enharinada y la desgasificamos con cuidado, esto es, presionando suavemente con la manos, sin desgarrar la masa. La extendemos con ayuda de nuestras manos.
Ahora la dividimos en porciones con un cuchillo. Yo prefiero hacerlas de un tamaño mediano, así que divido la masa en 13 porciones. Si queremos que todos los bollos sean iguales, lo mejor es pesarlos, así, nuestras porciones de masa pesarán unos 75 gramos cada una aproximadamente.
Es importante que tengamos en cuenta que las porciones de masa sólo se llenen de harina por un lado, así que a la hora de manipularlas, siempre pongamos la misma zona en contacto con la encimera. Esto nos hará más fácil bolear la masa.
¿Sabéis lo que es bolear? Yo lo he aprendido en este asalto y no es otra cosa que convertir la masa en una o varias bolas. Se trata de un paso muy importante ya que elimina irregularidades de la misma y crea una superficie lisa con la suficiente tensión para evitar que el gas que se forma en el interior se escape al exterior y se deshinche, haciendo que nuestros bollos pierdan esponjosidad.
¿Cómo lo hacemos? Pues cogemos una porción de masa y la colocamos sobre la superficie de trabajo limpia y libre de harina, con la parte de la harina hacia arriba y la cubrimos con la mano. La masa se pegará a la encimera creando resistencia y nosotros, con un juego de muñeca y ayuda de nuestros dedos y laterales de la mano, damos forma redonda a la porción. Esto aportará la tensión y forma que necesita la masa.
Después de que hayamos boleado todas las porciones de masa, las colocamos sobre una bandeja de horno en la que previamente hemos puesto un papel de hornear. Las cubrimos con un paño y las dejamos reposar una hora o hasta que dupliquen su tamaño. En esta ocasión las hemos dejado reposar unas 3 horas.
Yo suelo dejar que la masa repose siempre dentro del horno, apagado, porque está libre de corrientes.
Transcurrido este tiempo, sacamos la bandeja del horno y lo precalentamos a 200ºC.
Mientras esperamos que el horno esté listo, preparamos la cobertura, para ello, cascamos un huevo y separamos la yema de la clara. Ponemos la yema en un bol, añadimos la leche y batimos. Esto hará que la cobertura de los bollos suizos adquiera un tono más dorado. Un truco de mi familia francesa.
En otro bol mezclamos el azúcar con el anís hasta formar una textura húmeda y grumosa.
Otra técnica que he aprendido con esta receta es greñar. Se trata de hacer unos cortes a la masa de forma rápida, con seguridad y con cierta profundidad utilizando un cuchillo bien afilado. Esto es lo que vamos a hacer a las porciones de masa.
A continuación, pintamos con la mezcla de huevo y leche cada pieza con ayuda de una brocha.
Cubrimos la greña de cada bollo con la mezcla de azúcar y anís.
Una vez tengamos todos los bollos listos los llevamos al horno y horneamos durante 10 minutos o hasta que estén dorados.
Un consejo que nos da Ana es que tengamos en cuenta que, "A menor tamaño, antes llega la temperatura al centro del bollo, y se cuecen uniformemente con mucha temperatura y poco tiempo, que es lo ideal. Conforme los bollos son más grandes, empiezan a dorarse por fuera sin estar cocidos en el interior, y toca bajar la temperatura y alargar el tiempo para que cuando se doren por fuera, no estén crudos en el centro."
¿Qué os parece este asalto? A Monsieur Accidents y a mí nos ha conquistado. Se pueden tomar en el desayuno, en la merienda, como postre. Si los pruebas te van a apetecer a cualquier hora, ya verás.
Bon appétit!
Ahora la dividimos en porciones con un cuchillo. Yo prefiero hacerlas de un tamaño mediano, así que divido la masa en 13 porciones. Si queremos que todos los bollos sean iguales, lo mejor es pesarlos, así, nuestras porciones de masa pesarán unos 75 gramos cada una aproximadamente.
Es importante que tengamos en cuenta que las porciones de masa sólo se llenen de harina por un lado, así que a la hora de manipularlas, siempre pongamos la misma zona en contacto con la encimera. Esto nos hará más fácil bolear la masa.
¿Sabéis lo que es bolear? Yo lo he aprendido en este asalto y no es otra cosa que convertir la masa en una o varias bolas. Se trata de un paso muy importante ya que elimina irregularidades de la misma y crea una superficie lisa con la suficiente tensión para evitar que el gas que se forma en el interior se escape al exterior y se deshinche, haciendo que nuestros bollos pierdan esponjosidad.
¿Cómo lo hacemos? Pues cogemos una porción de masa y la colocamos sobre la superficie de trabajo limpia y libre de harina, con la parte de la harina hacia arriba y la cubrimos con la mano. La masa se pegará a la encimera creando resistencia y nosotros, con un juego de muñeca y ayuda de nuestros dedos y laterales de la mano, damos forma redonda a la porción. Esto aportará la tensión y forma que necesita la masa.
Después de que hayamos boleado todas las porciones de masa, las colocamos sobre una bandeja de horno en la que previamente hemos puesto un papel de hornear. Las cubrimos con un paño y las dejamos reposar una hora o hasta que dupliquen su tamaño. En esta ocasión las hemos dejado reposar unas 3 horas.
Yo suelo dejar que la masa repose siempre dentro del horno, apagado, porque está libre de corrientes.
Transcurrido este tiempo, sacamos la bandeja del horno y lo precalentamos a 200ºC.
Mientras esperamos que el horno esté listo, preparamos la cobertura, para ello, cascamos un huevo y separamos la yema de la clara. Ponemos la yema en un bol, añadimos la leche y batimos. Esto hará que la cobertura de los bollos suizos adquiera un tono más dorado. Un truco de mi familia francesa.
En otro bol mezclamos el azúcar con el anís hasta formar una textura húmeda y grumosa.
Otra técnica que he aprendido con esta receta es greñar. Se trata de hacer unos cortes a la masa de forma rápida, con seguridad y con cierta profundidad utilizando un cuchillo bien afilado. Esto es lo que vamos a hacer a las porciones de masa.
A continuación, pintamos con la mezcla de huevo y leche cada pieza con ayuda de una brocha.
Cubrimos la greña de cada bollo con la mezcla de azúcar y anís.
Una vez tengamos todos los bollos listos los llevamos al horno y horneamos durante 10 minutos o hasta que estén dorados.
Un consejo que nos da Ana es que tengamos en cuenta que, "A menor tamaño, antes llega la temperatura al centro del bollo, y se cuecen uniformemente con mucha temperatura y poco tiempo, que es lo ideal. Conforme los bollos son más grandes, empiezan a dorarse por fuera sin estar cocidos en el interior, y toca bajar la temperatura y alargar el tiempo para que cuando se doren por fuera, no estén crudos en el centro."
¿Qué os parece este asalto? A Monsieur Accidents y a mí nos ha conquistado. Se pueden tomar en el desayuno, en la merienda, como postre. Si los pruebas te van a apetecer a cualquier hora, ya verás.
Bon appétit!
46 comentarios
Como ya te he dicho, hemos coincidido en el asalto y te alabo el gusto, porque están riquísimos!! Una receta exquisita y que queda perfecta!! Bs.
ResponderEliminar¡Hola Julia!
EliminarNo me extraña, estos bollos suizos están buenísimos. En casa han desaparecido muy pero que muy rápido...
¡Un beso guapísima!
Esta es una de las recetas a las que más cariño tengo del blog, por no decir que es la que más, por la historia que compartí. Me alegro mucho de que los hayas escogido, te han quedado perfectos y con un paso a paso estupendo :)
ResponderEliminar¡Hola Ana!
EliminarHe disfrutado mucho del asalto a tu cocina, he aprendido y me ha encantado el resultado.
Tus escritos son preciosos, creo que por eso esta receta me ha elegido a mí y no y a ella. No dejes de escribir...
Estos bollos suizos, nada más sacarlos del horno, iban desapareciendo, ¿te lo puedes creer? Me tuve que poner seria porque necesitaba algunos para las fotos para el post... Así que tu receta ha triunfado.
¡Un beso guapísima!
¡Pero menuda pinta más rica! Me ha encantado lo bién que lo explicas ¡Muy buen asalto!
ResponderEliminarUn abrazo
¡Hola Juan!
EliminarMuchas gracias por tus comentarios.
He disfrutado mucho durante el asalto al blog de Ana, he aprendido técnicas y he disfrutado durante la elaboración de la receta.
¡Un beso guapísimo!
Mmmm estos bollos suizos me parecen ideales, y con todo el paso a paso seguro que me animo a hacerlos. ¡Una gran receta asaltada!
ResponderEliminarUn saludo,
Aránzazu de EL baúl de las delicias
¡Hola Aránzazu!
EliminarMuchas gracias por el comentario, a mí también me parecen ideales para tomar en cualquier momento, en el desayuno, merienda, de postre, siempre vienen bien. Una vez los pruebas ya no puedes parar.
Me gusta hacer el paso a paso para que la receta se pueda hacer más fácilmente.
¡Un beso guapísima!
!!! Bollos suizos!!. !que ricos !. Has escogido una receta estupenda , yo de pequeña en mi casa se han comido mucho , recuerdo que mi madre iba a una panadería cerca de casa y nos los traía , recién hechos ,! que tiempos!.
ResponderEliminar¡Hola Encarni!
EliminarSí, yo también recuerdo haberlos comido de pequeña y que me gustaban mucho, pero hasta ahora no los había hecho. Recién sacados del horno desaparecían... Están buenísimos.
¡Qué tengas un buen día!
Esta es una de mis recetas pendientes ¡¡buenísimos!!
ResponderEliminarBuen alalto!
¡Hola Chary!
EliminarSí, estos bollos suizos están buenísimo, ya me contarás cuando los hagas.
¡Un beso guapísima!
Te pillaba yo ahora mismo un par de suizos y me los comía de un asalto
ResponderEliminar¡Hola Banca!
Eliminar¡Jijijijiji! Me lo creo. Estos bollos suizos están buenísimos, te digo que en mi casa han desaparecido rápido justo al sacarlos del horno, ni esperar a que se enfriaran un poco, de hecho, tuve que esconder algunos para poder hacer las fotos...
¡Un beso guapísima!
Qué buenos los suizos, te han quedado como se dice "de dulce", manda un par para mañana el desayuno. Bss.
ResponderEliminar¡Hola! Muchas gracias por tu comentario. Estoy contigo en que los bollos suizos están buenísimos. Para el desayuno o la merienda o para cualquier momento, ¿verdad?
Eliminar¡Un beso guapísima!
No me pueden gustar más estos bollos, que ricos y que fotos tan bonitas, me encantan, felicidades Lola, como siempre tus recetas me encantan, incluso robadas..jaja..
ResponderEliminarBs
¡Hola Juna!
EliminarMuchas gracias por tus palabras. Me alegro de que te gusten mis receta, incluidas las robadas ;P
Te puedo asegurar que estos bollos suizos están buenísimos porque fueron desapareciendo conforme los saqué del horno, fue como... ¿pero donde están? Por favor, los mas bonitos dejádmelos para hacer las fotos... pero ya te digo que un poco más y me quedo sin hacerles fotos...
¡Un beso guapísima!
Tienen el color perfecto, con su azuquitar por encima uummm que hambreeee!!
ResponderEliminarNieves
¡Hola guapísimas!
EliminarLa verdad es que están buenísimos, en mi casa han desaparecido rápido justo al sacarlos del horno, ni esperar a que se enfriaran un poco, de hecho, tuve que esconder algunos para poder hacer las fotos...
¡Un beso!
te han quedado perfectos!! ay que riquísimos están!! dame dos
ResponderEliminarbesitos
¡Buenos días Hirma!
Eliminar¡Muchas gracias! La verdad es que están buenísimos, en mi casa han desaparecido rápido justo al sacarlos del horno, ni esperar a que se enfriaran un poco, de hecho, tuve que esconder algunos para poder hacer las fotos...
¡Un beso guapísima!
deliciosos estos bollos suizos, de mis primeras recetas de panes dulces en el blog, me traen buenos recuerdos, he ido a ver también la receta de Ana y es la más especial de todas, me deja sin palabras. Tu receta deliciosa con fotos muy bonitas. Besos y feliz semana
ResponderEliminar¡Hola Natalia!
EliminarPues yo hasta ahora no los había hecho y eso que me encantan. Me alegro de que te haya gustado este asalto, la receta y las fotos.
Los escritos de Ana tocan la fibra, por eso creo que esta receta me ha elegido a mí y no yo a ella.
¡Un beso guapísima!
Qué rica receta!!! Pensaba que te había comentado ya!! Vaya cabeza la mía. Me encanta el paso a paso que has hecho, ese doradito y el azúcar por encima, parece que oigo a los bollos suizos diciendo: cómeme!!! Con el hambre que tengo!! Jaja Buen asalto compañera!!
ResponderEliminar¡Hola Libia!
EliminarNo pasa nada, somos muchos y es normal, tranquila. Gracias por el comentario compañera.
Me alegro de que te guste la receta y el paso a paso. Siempre que puedo lo suelo hacer, me parece que así la receta queda más completa y es más fácil de elaborar.
¡Un beso guapísima!
Ay Lola, la verdad es que yo también estaba deseando empezar la temporada de asaltos, se me ha hecho largo el periodo de descanso, las cosas como son.
ResponderEliminarMe encantan tus bollos suizos, te han quedado de diez, yo no los hago a menudo y no sé porqué porque me parecen unos bollos que quedan geniales para desayunar (o a todas horas jajajaja), y con los consejos que nos ofrece Ana, vamos sobre seguro.
¡¡Que gran asalto!!
Un besito
¡Hola María!
EliminarEs que una vez que entras en este grupo de ladronzuelos y lo pasas también con cada asalto que cuando no lo haces lo echas de menos, ¿verdad?
Me alegro de que te gusten estos bollos suizos, en mi casa han desaparecido rápidamente, así buenos tenían que estar. Se pueden servir en el desayuno o en la merienda, o como buen dices, a todas horas...
La verdad es que he aprendido mucho con este asalto y he disfrutado de la elaboración y del resultado.
¡Un beso guapísima!
¡Adoro los bollos suizos! Son uno de mis bollitos favoritos, aunque yo nunca los he hecho con anís, así que tendré que probar esta versión para la próxima vez que me anime a hornearlos. Desde luego, lo que algunas tenemos con las masas no tiene nombre. Bueno, sí: se llama vicio :-P
ResponderEliminarCreo que te han quedado divinos.
¡Hola Verónica!
EliminarA Monsieur Accidents les encantan también.
Tienes toda la razón, es vicio lo que tenemos con masas.... Así que te animo a hacerlos porque están buenísimos. Y el anís le da un toque muy especial.
¡Un beso guapísima!
oooo per oque pinta que tienen, gracias por ese paso a paso de la elaboración, con mucho mimo y un resultado perfecto, me ha encantado pasar por tu cocina, buen asalto, besos
ResponderEliminar¡Hola Bea!
EliminarSiempre intento hacer las recetas con mucho mimo, creo que así salen más ricas y disfruto tanto del proceso como del resultado final. Estos bollos suizos están deliciosos.
Me alegro de que te guste mi cocina, estoy muy contenta con la reforma que le hice hace unos años.
¡Un beso guapísima!
Y quién no tenía ganas de empezar la temporada de robos y asaltos! Realmente este es un reto genial para conocer blogs, recetas y sobretodo a las personas geniales que hay detrás de este montón de platos, historias y amor, porqué si algo tienen en común nuestras cocinas es el amor que hay detras de cada una de nuestras entradas.
ResponderEliminarEl escrito de Ana que acompaña estos bollos es de los más bonitos que le he leído.
Ha escogido una de las mejores recetas de su blog.
Un beso
Blanca
¡Hola Blanca!
EliminarYo también tenía muchas ganas de empezar con la nueva temporada de asaltos. Estoy contigo en que este reto es genial para conocer nuevos blogs, nuevas recetas y sobre todo a personal geniales que hay detrás. También coincido contigo en que en nuestras cocinas los platos se elaboran con mucho amor, por eso nuestras recetas están tan buenas.
Creo que por ese escrito de Ana, la receta me ha elegido a mí y no yo a ella.
Muchas gracias por tus comentarios. Y estos bollos suizos están deliciosos.
¡Un beso guapísima!
Que bien te han quedado, yo me comía unos cuántos ahora mismos para merendar :) Yo no descubrí cómo se llamaban hasta que llegué a MAdrid jajaja en Cádiz no se suelen ver mucho y no les ponia nombre.
ResponderEliminar¡Un saludo!
¡Hola Guille!
EliminarMe alegro de que te hayan gustado estos bollos suizos, la verdad es que cuando los probé no me conformé con uno y a Monsieur Accidents le pasó lo mimo. Mi vecina vino y se llevó unos cuantos, así que ya te puedes hacer una idea de lo buenos que están.
A ver si nos vemos por Cádiz. ¡Un beso guapísimo!
Qué monada de bollitos, tengo ganas de hacerlos, aprovecharé un día de lluvia y los acompañaré de un buen chocolatito 😊 A ti te quedaron monísimos.
ResponderEliminarBss
¡Hola Rosa!
EliminarUn día de lluvia es ideal para ponerse a hornear, así que ya tienes la receta, estos delicioso bollos suizos. Ya me contarás.
¡Un beso guapísima!
Que bonitos te han quedado con ese copete perfecto, no me extraña que desaparecieran hasta calentitos del horno, puedo imaginar el olor que desprendería de tu cocina... Un paso a paso genial, con todas las técnicas bien explicadas y cuidadas (bolear, greñar...) dan ganas de empezar a prepararlos ahora mismo.
ResponderEliminarBesitos itos!!!
¡Hola Rosa!
Eliminar¡Muchas gracias! ¡Están buenísimos!
La verdad es que ha aprendido mucho con este asalto y además he disfrutado mucho tanto de la elaboración como del resultado.
Me gusta compartir el paso a paso para que podáis hacer la receta más fácilmente, aunque eso haga que el post sea más largo, creo que merece la pena.
Te animo a que los prepares ahora mismo. Ya me contarás.
¡Un beso guapísima!
Que ricos Lola, siempre me ha gustado mucho la bollería casera. Al principio la hacia a mano y ahra con la thermomix. Y mira que soy muy impaciente para todo, pero siempre digo lo mismo, no me importa esperar los tiempos que necesite una masa como esta para tener de resultado unos bollos tan ricos como los que te han salido a ti. Se ven fabulosos! besos!
ResponderEliminar¡Hola Mary Jose!
EliminarEres de las mías, la bollería casera me encanta. Yo utilizo la Kitchen Aid, la verdad es que me ayuda muchísimo, con ella todo es más fácil y rápido.
Me gustan las recetas que necesitan su tiempo, eso me permite gastarlo en leer un buen libro, ver los capítulos de mi serie preferida o pensar en el nuevo asalto.
Te recomiendo que hagas estos bollos suizos y ya me contarás cuando los pruebes, no vas a poder comerte solo uno.
¡Un beso guapa!
Con la tarde tan tonta que hace hoy aquí , con un buen chocolate y un libro y piensas que estás en el paraíso, que bocao le pegaba ahora mismo a uno de esos bollos.
ResponderEliminar¡Hola Eva!
EliminarEstos bollos están buenísimos y serían el acompañamiento perfecto para ese chocolate caliente.
¡Un beso guapísima!
Estos tiernos bollos son de mis favoritos, y salta a la vista el por qué! Ideales
ResponderEliminar¡Hola Andrea!
EliminarMuchas gracias por tu comentario. No me extraña de que los bollos suizos sean tus bollos preferidos, están buenísimos.
¡Un beso guapa!