Crítica gastronómica de El Café de las Viudas (Receta para una historia nº32)
lunes, 5 de junio de 2017
Debido a la aceptación que últimamente está teniendo la sección Receta para una historia, que se inició a la vez que el blog, me he visto obligada a dividir el post mensual en dos, uno que se seguirá publicando el último día del mes, en el que os propongo los ingredientes para elaborar una nueva historia y otro, que publicaré la primera semana del mes siguiente, en el que haremos las críticas culinarias de las historias que habéis elaborado con los ingredientes de la receta propuesta el mes anterior. ¿Qué os parece la idea?
Así, el último día del pasado mes de mayo compartí con vosotros los ingredientes de la Receta para una historia nº 33: No soy un monstruo, donde esperamos vuestros deliciosos platos.
Y hoy vamos a valorar y hacer la crítica correspondiente de los platos que habéis elaborado con los ingredientes de la Receta para una historia nº 32: El Café de las Viudas, que son los siguientes:
Plato nº1 elaborado por Juanlu C.:
La antigua inspectora de homicidios Eva Wärn disfrutaba de un Café latte que le había servido Marianne, la dueña del café situado en el casco antiguo de la población. Siempre le había encantado la espuma blanca con canela espolvoreada, así adivinó Marianne tiempo atrás cuando se conocieron. Le encantaba saborear ese pequeño momento y siempre le hacía olvidar su dura vida, tanto profesional como personal.
Marianne era una antigua enfermera, que tras morir su marido de infarto y jubilarse, decidió invertir todos los ahorros en montar un café para cambiar de vida y dejar atrás años de infeliz matrimonio, había conseguido parar años de odio, rabia irracional y agresividad. Marianne, ahora era feliz, atendiendo a la cada vez más numerosa clientela del barrio, gracias a sus exquisitos dulces y bollos y a sus excelentes cafés preparados con mimo y esmero.
Marianne y Eva solo compartían entre ellas un secreto, un secreto que les había cambiado las vidas.
Hace un año Eva se encontraba en la peor etapa de su vida, su marido había vuelto a beber y, de nuevo, le estaba pegando. Se encontraba investigando la muerte de un hombre en aparentemente circunstancias normales, pero que consiguió relacionar con otras 4 muertes más de otros hombres en los últimos años, todos muertos por causas de infarto. En las declaraciones de sus 4 esposas no se encontró nada extraño, sólo que habían salido a pasear por el centro y que cuando volvieron a casa, los hombres sufrieron el infarto.
En la autopsia realizada a último fallecido, al haber muerto sólo en casa, se encontraron en el estómago, restos de café y bollos de canela. Café, bollos de canela, paseo por el centro…, su intuición policial, le hizo sentir una corazonada. Sólo había un sitio en el centro que servía esos dulces.
Al día siguiente decidió visitar el café e interrogar a la dueña. Al entrar al local le inundó un reconfortante olor dulce a canela. El sitio estaba bastante concurrido, pero consiguió encontrar una mesita en la esquina. Tras esperar un poco se acercó una mujer mayor y ya le dejó una café y un par de bollos de canela.
Te estado observando un rato y creo que un café latte te vendrá muy bien, le dio la mujer.
Cómo ha podido averiguar que me gusta este café, con espuma de leche y canela, pensó Eva. Tras terminar la merienda, se dirigió a la barra a pagar con la intención de hablar y conseguir más información de la mujer.
Antes de que Eva pudiera decir algo, Marianne, le dijo. Invita la casa. Ya te sientes mejor? En tus ojos veo la frustración de muchos años de aguante, de rabia, de esperanzas rotas. Te mereces algo y alguien mejor. Vente con tu pareja o marido el próximo día y pide para él un Café de la Viuda. No está en la carta pero es la especialidad de la casa. Había pasado ya un año desde aquello. La investigación se cerró por falta de pruebas aparentes, Eva dejó la policía y él ya no estaba en su vida. Ésta había cambiado y el mejor momento de todos era, el de todas la tardes cuando degustaba un café latte con un bollo de canela en el Café de Marianne.
Marianne era una antigua enfermera, que tras morir su marido de infarto y jubilarse, decidió invertir todos los ahorros en montar un café para cambiar de vida y dejar atrás años de infeliz matrimonio, había conseguido parar años de odio, rabia irracional y agresividad. Marianne, ahora era feliz, atendiendo a la cada vez más numerosa clientela del barrio, gracias a sus exquisitos dulces y bollos y a sus excelentes cafés preparados con mimo y esmero.
Marianne y Eva solo compartían entre ellas un secreto, un secreto que les había cambiado las vidas.
Hace un año Eva se encontraba en la peor etapa de su vida, su marido había vuelto a beber y, de nuevo, le estaba pegando. Se encontraba investigando la muerte de un hombre en aparentemente circunstancias normales, pero que consiguió relacionar con otras 4 muertes más de otros hombres en los últimos años, todos muertos por causas de infarto. En las declaraciones de sus 4 esposas no se encontró nada extraño, sólo que habían salido a pasear por el centro y que cuando volvieron a casa, los hombres sufrieron el infarto.
En la autopsia realizada a último fallecido, al haber muerto sólo en casa, se encontraron en el estómago, restos de café y bollos de canela. Café, bollos de canela, paseo por el centro…, su intuición policial, le hizo sentir una corazonada. Sólo había un sitio en el centro que servía esos dulces.
Al día siguiente decidió visitar el café e interrogar a la dueña. Al entrar al local le inundó un reconfortante olor dulce a canela. El sitio estaba bastante concurrido, pero consiguió encontrar una mesita en la esquina. Tras esperar un poco se acercó una mujer mayor y ya le dejó una café y un par de bollos de canela.
Te estado observando un rato y creo que un café latte te vendrá muy bien, le dio la mujer.
Cómo ha podido averiguar que me gusta este café, con espuma de leche y canela, pensó Eva. Tras terminar la merienda, se dirigió a la barra a pagar con la intención de hablar y conseguir más información de la mujer.
Antes de que Eva pudiera decir algo, Marianne, le dijo. Invita la casa. Ya te sientes mejor? En tus ojos veo la frustración de muchos años de aguante, de rabia, de esperanzas rotas. Te mereces algo y alguien mejor. Vente con tu pareja o marido el próximo día y pide para él un Café de la Viuda. No está en la carta pero es la especialidad de la casa. Había pasado ya un año desde aquello. La investigación se cerró por falta de pruebas aparentes, Eva dejó la policía y él ya no estaba en su vida. Ésta había cambiado y el mejor momento de todos era, el de todas la tardes cuando degustaba un café latte con un bollo de canela en el Café de Marianne.
Plato nº2 elaborado por Lidia V. del blog Nosinmisgafasdesol:
Un hombre de mediana edad que trabajaba como médico en un hospital muy reconocido aparece muerto en extrañas circunstancias por lo que la inspectora Eva Wärn decide hacerse con el caso. Las primeras pistas la llevan a que el día anterior estuvo en la pastelería de Marienne con la que le unía una gran amistad ya que en su adolescencia habían sido novios pero finalmente se había casado con una periodista llamada Zaire, se descubrió que engañaba a su esposa con una enfermera del hospital con la que llevaba más de 10 años y que tenían hijos en común todo esto a espalda de su esposa y que tenía varias incidencias de maltrato a su mujer pero aún la orden de alejamiento no había llegado.... todas estas primeras pistas reconducirán el caso a un asombrante final donde la enfermera no será la enfermera que creemos, la pastelera no será la que todos creemos, la inspectora no será la que todos creemos y la mujer tampoco lo será... algo une a estas 4 mujeres que a su vez están casadas con sus respectivos maridos, les unía tan fría y solamente el amor por el médico, ¿quién habrá sido de las 4?
Plato nº3 elaborado por Carolina Ll. del blog Mi meta tu salud:
Habían pasado muchos años desde que Marianne había cambiado el oficio de enfermera por su gran pasión, la pastelería.
Una mañana de primavera del mes de mayo, como siempre, abrió su café en el casco antiguo pensando que sería un día más de la semana, pero la verdad es que en pocos instantes su vida daría un giro de 180º.
Encontró en su humilde establecimiento a un individuo que a priori no le era familiar esposado en una de esas sillas que estuvo meses para hacerse con ellas después de haberse enamorado perdidamente de ellas en uno de sus viajes a París.
El hombre, tenía síntomas de haber sido maltratado.
No sabía si estaba muerto o inconsciente, así que se acercó sigilosamente y comprobó que no respiraba.
Junto a él estaban dos bollos de canela y una nota muy extraña que contenía la frase "Especial de la viuda".
Después de un par de minutos o más, se percató que lo más sensato era llamar a la policía.
Pocos minutos después escuchó el sonido de las sirenas y vio 3 coches de policía aparcando delante del café. De uno de ellos bajaba una esbelta mujer, la inspectora Eva Wârn, que se dirigía con paso firme hacia el local, momento en el que se percató que era demasiado tarde para dejar la nota en su sitio, así que se la guardó en uno de sus bolsillos.
Después de una hora o más de preguntas, aunque a Marianne le parecieron eternas.
Al salir de la comisaría vio en el otro extremo de la calle a 5 hombres. Sin saber porqué fijó la mirada en uno de ellos, y le entró un escalofrío por todo el cuerpo. No entendía el porqué, así que sin dudarlo se puso a andar por la calle en sentido contrario.
A los pocos metros se percató que esos extraños hombres la seguían, así que aceleró el paso y se metió en el primer café que encontró. Pidió un café latte con un poco de canela espolvoreada por encima de la espuma blanca, y cogió el periódico para poder ocultar su rostro y no ser descubierta.
Pero un gran descubrimiento en él le hizo quedarse helada. Justo había abierto la página en que salía la noticia que en esa semana se habían hallado 4 cuerpos en diferentes locales de la ciudad, y que sus muertes se habían dado en extrañas circunstancias, los 4 aparecieron esposados con signos de haber sido maltratados... ¿Pero qué relación tenían todos esos sucesos con ella?
Sin duda, ese gran secreto de hacía años, el cual había olvidado, seguro que era la clave...Continuará...
Una mañana de primavera del mes de mayo, como siempre, abrió su café en el casco antiguo pensando que sería un día más de la semana, pero la verdad es que en pocos instantes su vida daría un giro de 180º.
Encontró en su humilde establecimiento a un individuo que a priori no le era familiar esposado en una de esas sillas que estuvo meses para hacerse con ellas después de haberse enamorado perdidamente de ellas en uno de sus viajes a París.
El hombre, tenía síntomas de haber sido maltratado.
No sabía si estaba muerto o inconsciente, así que se acercó sigilosamente y comprobó que no respiraba.
Junto a él estaban dos bollos de canela y una nota muy extraña que contenía la frase "Especial de la viuda".
Después de un par de minutos o más, se percató que lo más sensato era llamar a la policía.
Pocos minutos después escuchó el sonido de las sirenas y vio 3 coches de policía aparcando delante del café. De uno de ellos bajaba una esbelta mujer, la inspectora Eva Wârn, que se dirigía con paso firme hacia el local, momento en el que se percató que era demasiado tarde para dejar la nota en su sitio, así que se la guardó en uno de sus bolsillos.
Después de una hora o más de preguntas, aunque a Marianne le parecieron eternas.
Al salir de la comisaría vio en el otro extremo de la calle a 5 hombres. Sin saber porqué fijó la mirada en uno de ellos, y le entró un escalofrío por todo el cuerpo. No entendía el porqué, así que sin dudarlo se puso a andar por la calle en sentido contrario.
A los pocos metros se percató que esos extraños hombres la seguían, así que aceleró el paso y se metió en el primer café que encontró. Pidió un café latte con un poco de canela espolvoreada por encima de la espuma blanca, y cogió el periódico para poder ocultar su rostro y no ser descubierta.
Pero un gran descubrimiento en él le hizo quedarse helada. Justo había abierto la página en que salía la noticia que en esa semana se habían hallado 4 cuerpos en diferentes locales de la ciudad, y que sus muertes se habían dado en extrañas circunstancias, los 4 aparecieron esposados con signos de haber sido maltratados... ¿Pero qué relación tenían todos esos sucesos con ella?
Sin duda, ese gran secreto de hacía años, el cual había olvidado, seguro que era la clave...Continuará...
Plato nº4 elaborado por Encarni M.:
En una pequeña localidad costera hay una pastelería café en el casco antiguo de la ciudad, la cual la regenta Marianne una antigua enfermera, ella es famosa por sus bollos de canela y su café latte con un poco canela espolvoreada por encima de la espuma .
Para el que va a su pastelería es un secreto el componente de los bollos y el café .
Un día se presenta en su establecimiento la inspectora Eva Warm, quiere investigar la extraña muerte de cuatro hombres que acompañados de sus esposas han pasado por la pastelería, se debe la circunstancias de que todos han maltratado a sus mujeres. Marianne también sufrió maltrato por parte de su marido y por eso le gustaba ayudar a esas parejas que pasaban por su local y sufrían maltrato, ella se daba cuenta enseguida como el hombre ridiculizaba a su pareja con odio y rabia.
La inspectora le comentó que estaba investigando la muerte de cuatro hombres, todos ellos habían pasado por su pastelería , al poco tiempo todos ellos habían muerto en extrañas circunstancias con un fuerte dolor en el pecho, el forense diagnosticó infarto.
Hablando con Marianne se da cuenta la inspectora el encanto la dulzura que emanan de ella con su melena plateada y sus gafas en la nariz. Pasado un tiempo entra de nuevo en la pastelería la inspectora Warn acompañada de su marido que durante años ha soportado su maltrato. Le pidió sus famosos bollos y su delicioso café y para su marido el Especial de las Viudas.
Para el que va a su pastelería es un secreto el componente de los bollos y el café .
Un día se presenta en su establecimiento la inspectora Eva Warm, quiere investigar la extraña muerte de cuatro hombres que acompañados de sus esposas han pasado por la pastelería, se debe la circunstancias de que todos han maltratado a sus mujeres. Marianne también sufrió maltrato por parte de su marido y por eso le gustaba ayudar a esas parejas que pasaban por su local y sufrían maltrato, ella se daba cuenta enseguida como el hombre ridiculizaba a su pareja con odio y rabia.
La inspectora le comentó que estaba investigando la muerte de cuatro hombres, todos ellos habían pasado por su pastelería , al poco tiempo todos ellos habían muerto en extrañas circunstancias con un fuerte dolor en el pecho, el forense diagnosticó infarto.
Hablando con Marianne se da cuenta la inspectora el encanto la dulzura que emanan de ella con su melena plateada y sus gafas en la nariz. Pasado un tiempo entra de nuevo en la pastelería la inspectora Warn acompañada de su marido que durante años ha soportado su maltrato. Le pidió sus famosos bollos y su delicioso café y para su marido el Especial de las Viudas.
Bueno, y ahora os toca a vosotros, pero antes de que os pongáis con la tarea, comparto con vosotros unos puntos a tener en cuenta para que os ayuden a escribir una buena crítica gastronómica:
- Documentarse:
Es importante que antes de comenzar a escribir la crítica os leáis bien las diferentes historias o platos que l@s colaborador@s han elaborado y compartido.
- Comprobar:
Para poder hacer una buena crítica es importante conocer los ingredientes que se indicaron en la receta y los que se han utilizado en cada uno de los platos anteriores.
- Evitar frases hechas y adjetivos exagerados:
No hay que abusar de adjetivos que magnifiquen o exageren lo que queremos decir, así que se deberíamos evitar utilizar adjetivos como magnífico o fantástico.
- Argumentar los juicios de valor:
No es sólo decir me ha gustado más el plato de... y menos la historia de..., hay que argumentar estos juicios adecuadamente.
- Profundizar en las sensaciones:
Normalmente, o al menos a mí me pasa, los platos que pruebo me transmiten sensaciones, por lo que a la hora de elaborar una crítica es bueno que expliquemos las sensaciones y emociones que nos han transmitido esas historias.
Y ahora sí, estamos todos listos para hacer una buena crítica gastronómica de los platos que nos han presentado l@s colaborador@s y elegir la mejor historia entre todos.
¡¡Espero vuestras críticas y comentarios!!
20 comentarios
Bueno voy a darte mi opinión a lo que has puesto hoy en el posst.
ResponderEliminarLeyéndolos todos me gusta mucho el de JuanL ,como cuenta la historia y lo bien que lo describe.
El plato estrella de todas la historia son " los bollos con canela " y el" café latte con su espuma y espolvoreado con canela". Pero el plato principal es sin duda el " Especial de las Viudas ".
El de Carolina LL también me gusta mucho , enfoca la historia diferente y le da también un giro distinto , pero deja la todo el relato un poco al aire .
El plato principal como todas la historia entorno a el" café latte , con espuma espolvoreado con canela y sus famosos bollos", pero el principal Especial de las Viudas .
de entre los dos me quedo con el de JuanL
Buenos días Encarni!! En primer lugar, agradecerte tu critica gastronómica. La historia tanto de Carolina como la de Juanlu son muy buenas.
EliminarTe invito a que dejes tu crítica gastronómica de la Receta para una historia nº33 No soy un monstruo.
¡Gracias por pensar diferente!
Mi crítica gastronómica es la siguiente:
ResponderEliminarMe gusta mucho el plato nº4 elaborado por Encarni M. Creo que ha elaborado una historia muy concisa reuniendo todos los ingredientes de la historia.
Pero mi favorita es la de Carolina LL del blog Mi Meta tu Salud, ya que su plato reúne my bien los ingredientes y plantea una historia muy original. Me ha gustado el detalle de la nota del Café de las Viudas y los hombres esposados... Cómo terminará la historia... Me ha dejado con la intriga.
Buenos días Juanlu!! En primer lugar, agradecerte tu critica gastronómica. La historia tanto de Carolina como la de Encarni son muy buenas.
EliminarTe invito a que dejes tu crítica gastronómica de la Receta para una historia nº33 No soy un monstruo.
¡Gracias por pensar diferente!
Difícil hacer una crítica gastronómica para estos cuatro platos del café de las viudas. Leídos los cuatro el primer plato Juanlu C. es el que ás me gusta, emplea todos los ingredientes muy bien mezclado, una pizquita de cada uno de ellos y van formando una historia con un final no se si llamarlo feliz pero al menos sorprendente.
ResponderEliminarel de Carolilna Ll. le da a la receta un giro diferente y dejarnos con la intriga de un secreto hace tiempo olvidado invita a seguir esperando la próxima receta.
Besos
Buenos días Raquel!! En primer lugar, agradecerte tu critica gastronómica. La historia tanto de Juanlu como la de Carolina son muy buenas.
EliminarTe invito a que dejes tu crítica gastronómica de la Receta para una historia nº33 No soy un monstruo.
¡Gracias por pensar diferente!
Me ha encantado la historia de Encarni aunque no hay mucho misterio pero reúne todo lo importante. Vaya pintón tienen las fotos, una pena no poder probarlos todos ;)
ResponderEliminarBuenos días Cristina!! En primer lugar, agradecerte tu critica gastronómica. La historia de Encarni es muy buena.
EliminarMe alegro de que te hayan gustado las fotos de los platos ;P
Te invito a que dejes tu crítica gastronómica de la Receta para una historia nº33 No soy un monstruo.
¡Gracias por pensar diferente!
Pues que dificil la elección entre los cuatro platos! de todos ellos, me quedaría de todas maneras con el primero, el de Juanlu, porque es el que más me trasmite, mezcla mejor los ingredientes y hace que la historia tenga un punto de misterio!
ResponderEliminarBuenos días guapísima!! En primer lugar, agradecerte tu critica gastronómica. La historia de Juanlu es muy buena.
EliminarTe invito a que dejes tu crítica gastronómica de la Receta para una historia nº33 No soy un monstruo.
¡Gracias por pensar diferente!
ohh, es la primera vez q leo este tipo de post, ayy estoy hasta emocionada,me he engachado a la historia y me parece tan original, me quedo sin duda con la Carolina el plato nº 3, desde el principio su forma de contarlo y los detalles me han engachado hasta el final dejando esa sensación de querer saber más y nos transporta a algún secreto del pasado que podremos descubrir en próximas entregas, creo que hila muy bien la historia mezcalndo todos los ingredientes de la receta, me ha gustado¡¡¡ un saludo
ResponderEliminarBuenos días guapísima!! En primer lugar, agradecerte tu critica gastronómica. La historia de Carolina es muy buena.
EliminarTe invito a que dejes tu crítica gastronómica de la Receta para una historia nº33 No soy un monstruo.
¡Gracias por pensar diferente!
Que raro es este tipo de post, pero viendo la recceta, creo que el artículo que más me gusta es el número 1 elaborado por Juanlu C, a parte de que emplea todos los ingredientes ha sabido amasarlos en la historia de manera que nos mete en ella, en una simple visita la historia está contada de manera muy sutíl, la última parte me parece excepcional cuándo le dice que vaya con su marido a tomar el café de las viudas!! me ha encantado!
ResponderEliminarEl de Carolina está tambien muy bien engancha mucho, pero ya sabemos como es ella de sibilina... al final te lía, y está muy bien construido no le falta nada de la receta pero..
Un saludo me ha gustado mucho este tipo de post, que ideas más chulas tienes copón!
Buenos días Carmen!! En primer lugar, agradecerte tu critica gastronómica. La historia tanto de Juanlu como la de Carolina son muy buenas.
EliminarTe invito a que dejes tu crítica gastronómica de la Receta para una historia nº33 No soy un monstruo.
¡Gracias por pensar diferente!
¡Hola!
ResponderEliminarA ver con tu permiso voy a empezar haciendo una autocrítica sobre mi receta. Me he dado cuenta que repito mucho palabras como percató, por lo que debería cuidar esos detalles y buscar sinónimos. Luego lo de siempre, estoy muy de acuerdo con Yoblogueo, a veces quiero contar tanto, o no filtro bien mis ideas que termino por liándola un poco jajajaja
De todos los relatos quizás me quede con el de Juanlu C. Ha usado a la perfección los ingredientes y ha sabido crear una historia con un buen hilo, cuidando además el léxico.
No obstante, y ahora pareceré quizás una pedorra, tengo que decir que todos, sin excepciones me han gustado. Te cuento el porque.
Este tipo de recetas que nos propones nos ayudan a hacer volar nuestra imaginación y claro está que aunque la creatividad de cada uno es muy diferente y una u otra puede llamarte más la atención, como en mi caso con la de Juanlu C, me gusta leer las ideas de los demás compañeros como las que nos proponen Encarni M o Lidia. Es decir, me gusta poder descubrir las otras ideas de los compañeros que para mí son interesantes todas por un igual.
Y te dejo ya porque no tengo remedio, creo que estoy empezando a liarme jajajajaja
Besotes
Buenos días Carolina!! En primer lugar, agradecerte tanto tu autocrítica como la crítica gastronómica de los demás platos.
EliminarTienes razón, todas las historias son buenas.... aunque hay que tener en cuenta que el paladar de cada crítico es diferente, eso no significa que el de los otros críticos no sean buenos, simplemente son diferentes.
Lo importante de este post colaborativo mensual es que nos ayuda a volar la imaginación, como tú dices, a pensar diferente y a desarrollar nuestra creatividad, por eso te animo a que sigas participando en ellos.
Y ahora, te invito a que dejes tu crítica gastronómica de la Receta para una historia nº33 No soy un monstruo.
¡Gracias por pensar diferente!
Hola Lola,
ResponderEliminarComo mola tu sección de Receta para una historia. Desde luego tus ingredientes sirven para desatar la imaginación de más de uno y después de leer las cuatro historias me encanta comprobar como cada una de ellas, aún teniendo la misma base, tienen un rumbo distinto. Viva la creatividad!
Lo primero, darle la enhorabuena a los cuatro, ya que tiene mucho mérito sentarse, pensar en una historia y expresarla claramente.
Y dicho esto, aquí va mi crítica gastronómica. El que más me ha llamado es el primero, de Juanlu C. Me gusta mucho el ritmo en el desarrollo de lo que va contando y cómo lo va hilando. Ha utilizado muy bien todos los ingredientes que diste, en su justa medida. Además, el punto macarra de la pastelera con su 'café de las viudas' es genial.
Un beso!
Buenos días Pilar!! En primer lugar, agradecerte tu critica gastronómica. La historia tanto de Juanlu como las de Lidia, Carolina y Encarni son muy buenas.
EliminarTe invito a que dejes tu crítica gastronómica de la Receta para una historia nº33 No soy un monstruo.
¡Gracias por pensar diferente!
Hola Lola, que sección más original la Crítica gastronómica. YO reconozco que no he participado nunca porque tengo muy poca imaginación para crear historias, a pesar de que des los ingredientes, por eso me he quedado boquiabierta con las cuatro recetas que has compartido.
ResponderEliminarLa que más me ha gustado ha sido la de Juanlu; está muy bien contada y ha unido muy bien todos los "ingredientes" de la historia, sin resultar forzado. EL de Carolina también me ha gustado mucho por lo mismo; aunque las otras dos también están fenomenal. ¡La verdad es que es difícil elegir!
Por ierto, ya he visto el libro de No soy un monstruo recomendado por más gente, así que ahora mismo lo añao a mi lista de libros que quiero leer.
Un beso.
Buenos días Leyre!! En primer lugar, agradecerte tu critica gastronómica. La historia tanto de Juanlu como la de Carolina son muy buenas.
EliminarTe invito a que dejes tu crítica gastronómica de la Receta para una historia nº33 No soy un monstruo. Ya verás como este libro te va a gustar, ya me contarás.
¡Gracias por pensar diferente!