Strudel de manzana

viernes, 2 de diciembre de 2022

El mes pasado, Monsieur Accidents encontró en las estanterías de una librería el libro "Souvenir. Pasteles, viajes y recuerdos" de Isabel Pérez (Aliter Dulcia) y Col&Col Ediciones.

Este libro te lleva de viaje y hoy nos hace viajar a un destino muy dulce con la "Apfelstrudel" a Múnich, Alemania.

Isabel nos cuenta que "Esta receta pudo tener su origen en el baklava y pasar, de mano en mano, de los soldados jenízaros del Imperio Otomano a los austrohúngaros de Centro Europa y convertirse, así en este famoso hojaldre relleno de compota de manzana que hoy todos conocemos.

Normalmente se sirve caliente sobre una cama de crema de vainilla o acompañado con una bola de helado. Sea como sea, el sabor de la canela y el contraste entre el dulce caliente y la crema o el helado frío, lo convierte en un bocado absolutamente delicioso."

Y ahora sí, vamos con nuestra versión de esta receta, para ello, vamos a necesitar los siguientes ingredientes:

Para el relleno:

2 manzanas

50 g de pasas

90 g de azúcar moreno

1 cucharadita de canela molida

1/2 cucharadita de nuez moscada

30 g de pan rallado

30 g de almendra cruda molida

Para hornear:

1 lámina de hojaldre

1 huevo

Para decorar:

1 naranja

1 puñado de almendras laminadas

1 chorreoncito de caramelo líquido

azúcar glas

Las manzanas que vamos a utilizar son Granny Smith porque son ácidas y combinan muy bien con el dulce del strudel. Además, son manzanas ideales para hacer al horno porque se deshacen y quedan cremosas.

Para elaborar esta receta vamos a utilizar uno de los productos que vienen en la última caja Degustabox que, si aún no la conoces, aquí te hablo de ella.

El azúcar moreno Moka intenso de Azucarera es azúcar moreno de caña integral sin refinar que posee un sabor intenso que recuerda a uvas pasas y frutos secos por lo que la hace ideal para elaborar nuestra receta.

Preparación:

Isabel nos dice que pelemos las manzanas, las descorazonemos y las cortemos en trozos que introduciremos en un bol, Añadamos el resto de los ingredientes y mezclemos. Traslademos la mezcla a un recipiente, tapemos y dejemos reposar una media hora para que las manzanas se impregnen bien de los sabores.

El pan rallado no aportará sabor, pero ayudará a absorber el líquido que se forme durante la cocción y hará que el relleno quede más compacto.

Yo suelo hacerlo de otra manera, introduzco en un bol las pasas, el azúcar moreno, la canela, la nuez moscada, el pan rallado y la almendra molida y lo mezclo hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.

Lavo y seco muy bien las manzanas, las pelo y las corto en rodajas finas, a continuación, las corto en bastoncitos y finalmente en cubitos pequeños. El objetivo es conseguir un relleno suave, pero con textura. Conforme voy cortando, voy agregando los trocitos de manzana al bol y mezclando con el resto de los ingredientes.

Una vez, he terminado con las manzanas y están bien integradas, tapo el bol y dejo reposar durante media hora como mínimo.

Preparamos una bandeja de horno con papel de hornear. Precalentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.

Extendemos la masa de hojaldre y colocamos el relleno en un extremo de la masa. Envolvemos la masa sobre sí misma y la colocamos sobre la bandeja de horno. Yo suelo cerrar los extremos y hacer unos cortes en la superficie para que el calor de dentro pueda salir durante la cocción.

Batimos la yema de un huevo y pintamos el hojaldre. También podemos añadir un poco de agua que mezclamos con la yema de huevo antes de pintar.

Llevamos al horno a una altura media-baja y horneamos durante 40 minutos o hasta que el hojaldre esté dorado.

Presentación:

Isabel recomienda servir caliente acompañado de crema o con una bola de helado de vainilla por encima.

Nosotros vamos a seguir la recomendación de Monsieur Accidents que, recientemente ha estado en Frankfurt y ha disfrutado de este postre allí. Así que decoramos con unas rodajas de naranja, almendra laminada, caramelo y azúcar glas.

El refrescante cítrico combina muy bien con el dulce del apfelstrudel que lo hace más ligero y no tan pesado que si lo sirviéramos con crema y helado.

Por otro lado, la canela tiene un sabor peculiar, da sensación de calidez al strudel de manzana, aunque se tome frío. Por eso siempre la añado a todo lo que puedo.

¿Has probado alguna vez esta delicia de postre? ¿Lo has elaborado? ¿Lo sueles hacer así? En este post hemos descrito por un lado la receta de Isabel Pérez y, por otro lado, hemos hecho mi receta. Así que tienes dos recetas por el precio de una. Tú decides cuál hacer o, por qué no, hacer las dos.