Tortitas con masa madre sin gluten y con un toque a coco
viernes, 6 de noviembre de 2020El mes pasado estuve haciendo el "Taller de pan sin gluten con masa madre" organizado pro Cris Marco de "Postres sin gluten". En él aprendimos a elaborar masa madre sin gluten para posteriormente hacer pan.
Una de las recetas que Cris compartió con nosotros para utilizar los restos de masa madre fueron las tortitas y os puedo decir que se han convertido en un plato habitual en nuestros desayunos, sobre todo, durante los fines de semana.
¿Me acompañas a la cocina a preparar mi versión de las "Tortitas con los refrescos de la masa madre sin gluten"? Pues los ingredientes que vamos a necesitar son:
2 huevos
35 gramos de azúcar de coco
45 ml de aceite de oliva virgen extra
190 g de harina de arroz
40 gramos de almidón de maíz
20 gramos de fécula de patata
1 cucharadita de levadura química
100 g de masa madre
150 ml de bebida de coco
1/2 cucharadita de esencia de vainilla
Para elaborar esta receta vamos a aprovechar algunos de los productos que vienen en la última caja Degustabox, que si aún no conoces estas cajitas, aquí te hablo de ellas. En esta ocasión vamos a utilizar el azúcar de coco no refinado de cultivo ecológico procedente de Indonesia, que viene en un envase 100% reciclable, que para mí también es un detalle importante. Este azúcar moreno de Azucarera, no tiene sabor a coco ya que se extrae de la salvia de las flores de los cocoteros y su color es marrón oscuro. Este azúcar aportará dulzor y color a las tortitas.
La fécula de patata se puede sustituir por almidón de maíz.
Preparación:
En un bol introducimos los huevos y añadimos el azúcar. Batimos hasta espumar. Yo suelo utilizar un procesador de alimentos.
Añadimos el aove y mezclamos.
Agregamos la mitad de la harina mezclada con la levadura y mezclamos de nuevo.
Añadimos la masa madre y batimos.
Vertemos la leche de coco y la esencia de vainilla y batimos nuevamente.
Añadimos el resto de la harina mezclada con la levadura y mezclamos hasta conseguir una masa homogénea. Nos ayudamos con una lengua para separar, si es necesario, los ingredientes que se hayan quedado pegados en las paredes del bol y no se hayan podido mezclar con el resto de la masa y los incorporamos.
Si la masa ha quedado demasiado líquida podemos añadir 25 gramos de harina y, si aún queda líquida, agregamos 25 gramos de harina más. Yo no suelo agregar harina porque la masa me queda bien con los ingredientes iniciales.
Vertemos la masa en un recipiente con tapa y lo dejamos reposar en la nevera hasta su utilización al día siguiente. Como nosotros somos dos en casa, tenemos masa para hacer tortitas dos días.
Engrasamos una sartén con un poco de mantequilla y calentamos a fuego medio. Si vemos que tiene mucha grasa, pasamos una hoja de papel de cocina para que absorba el exceso de grasa. Vertemos un cazo de masa dándole forma redonda. Dejamos que se haga hasta que la masa comience a asentarse y aparezcan burbujitas, momento en el que le damos la vuelta, con ayuda de una espátula, y dejamos que se haga por el otro lado.
Repetimos la operación con el resto de la masa hasta conseguir 8 tortitas iguales. Me encanta ver la torre de tortitas, pero como somos dos, hago 4 tortitas un día y otras cuatro al día siguiente, así desayunamos tortitas recién hechas cada mañana.
Presentación:
Colocamos las tortitas en un plato y rociamos con una crema o sirope. Nosotros vamos a utilizar la leche condensada La lechera sin lactosa y desnatada que viene también en la última caja Degustabox. Más ligera, con un sabor más suave y color más oscuro que la tradicional. Terminamos decorando con un puñado de arándanos y granos de granada que mi vecina me ha traído del huerto de su cuñado, una fruta de temporada que me gusta mucho.
¿Qué te parece este plato para celebrar el fin de semana? a nosotros nos encanta. Y como la masa se prepara el día de antes, las tortitas se van haciendo mientras se prepara el café. Un desayuno que le gustará a todos los miembros de la casa.
Bon appétit!
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